UNA DE FÚTBOL
EL DIARIO OLE – BUENOS AIRES, 6 DE MARZO 2006
“ME ENCANTA USAR LA DIEZ”
Roberto Cornejo acepta el desafío de reemplazar a Lucas Lobos y cuenta sus desventuras en Perú.
Escribe: JORGE LUIS SIERRA.
MAR DEL PLATA (ENVIADO ESPECIAL). Si al hincha de Gimnasia no le alcanzó con el garrotazo que se comió con el torneo perdido, al toque nomás ligó más: le vendieron a Lucas Lobos al Cádiz. Pero mientras el enganche acaba de debutar en España, acá, en Punta Mogotes, hay alguien que ya sueña con devolverle la alegría a la gente y ocupar el puesto del ídolo. ¡Se tiene una fe! A los 22 años, Roberto Cornejo, el “Toto”, zurdo, ex San Lorenzo, Dorados de Culiacán de México y Universitario de Perú, se entusiasma: "¿Si me tiran la camiseta 10? Me encanta. Con ese número todos te miran distinto. Piensan que algo bueno podés ofrecer. Ojo, no la pienso pedir. Sólo quiero jugar de enganche, con la 25 o la 30... Desde Perú veía a Lobos, tuvo un nivel bárbaro. Me impresionó. Pero no puedo ser su sucesor. No voy a decir Lobos ya está, que ocuparé su lugar. Soy Cornejo".
—La comparación se impone...
—Siempre es así. No voy a mentir y decir que soy mejor que él. Lo deberé mostrar en la cancha.
—¿Qué jugador se verá?
—Que me vean en la cancha. No voy a decir nada... Porque las maravillas tienen que estar en el juego, no en las palabras.
—¿Qué ánimo encontraste?
—Hay sed de revancha. Basta ver al Mono (Navarro Montoya) cómo se mata en el gimnasio, con la trayectoria que tiene...
—¿Venís con ritmo de fútbol, estabas jugando?
—Vengo de una experiencia pésima, je. Perú es un desastre.
—Eeeepa... ¿Qué pasó?
—¡Qué no pasó! Me quisieron echar a los tres días. Pisé Lima, jugué bien un partido y era el chato de oro. A los tres días entré 15 minutos con el Cristal y el martes me querían rescindir el contrato. Les dije que me paguen todo y no había problema, pero se iban a quedar con las ganas de verme. ¡Mirá si no voy a rendir en Perú!
—Te llevó Basualdo, ¿no salió a bancarte?
—Pepe tenía que luchar con toda la desorganización. Si peleaba por mí se le complicaba. Un contrato no les significa nada. Te pagan de a puchitos, como a un albañil. Perdí plata. No vuelvo más.
—¿Y de fútbol ni hablar?
—Parecen los pibes del barrio. Por suerte apareció Gimnasia.
—¿Pensaste que podías volver a San Lorenzo?
—Menos. Al hincha le estoy muy agradecido pero a otros nada. Me hubiera gustado que Savino me dijera por qué quedaba libre. Me enteré por los diarios. Pero bueno, así está San Lorenzo, es un quilombo bárbaro. Me duele porque es mi casa.
—Venís palo y palo, ¿no?
—Me banqué que me basurearan... Ahora tengo el premio en Gimnasia. Con tanta sed de revancha como mis compañeros.
CARTA DE ABEL PERALTA A JORGE LUIS SIERRA
Lima, 6 de Enero del 2006
Estimado Jorge Luis Sierra:
Hoy por la tarde mientras revisaba las noticias en la web del diario, me topé con la nota que en él le hacen al ex ¿jugador? de universitario de Deportes, Roberto Cornejo... y ante la cantidad de mentiras que soltó escudándose en la distancia, me siento en el deber moral de ensayar una respuesta: Y para ello, puedo empezar contándole que el único hincha de la U que estuvo de acuerdo que al “Toto”, mínimamente se le dé una oportunidad en nuestro fútbol, fui yo; aquí toda la prensa lo juzgó a priori desde el primer entrenamiento, donde no demostró nada que justifique su condición de extranjero. Sin embargo me pareció que de una u otra forma eran injustos con él (digamos que a ningún fanático le hace mucha gracia que traigan un jugador al club y no pueda aportarle nada)...
Miente el ¿señor? Cornejo en la nota... miente en el 90% de sus afirmaciones. No trataré de ser objetivo y analizaré sus palabras con el estado de visceral indignación que, sabrá comprender usted, me invade:
1.- Dice Roberto Cornejo que va a mostrar en la cancha ser mejor que Lucas Lobos... que no lo va a decir, pero que lo va a demostrar. A bueh... yo que lo he padecido en la cancha, puedo garantizarle a los hinchas del Lobo, con toda seguridad, que el mencionado jugador de ninguna manera llegará nunca al nivel futbolístico de la máxima figura de Gimnasia de la pasada temporada... por ahí quizá al metegol… pero en el verde rectángulo de grass, ni en el mejor de sus sueños.... Es que Cornejo no era malo: ¡Era horrible!
2.- Cuenta el inefable “Toto” que apenas pisó Lima jugó un buen partido y era el "chato de oro", lo que obviamente hubiese traído consigo que saliera en las portadas de los diarios, notas de los programas deportivos de tv, etc, etc, etc. Ahora bien, haciendo marcha atrás, creo recordar que en una ocasión sí que fue noticia durante cuatro días, y los reporteros morían por conseguir una nota con él; pero ¡Vaya si no fue por haber jugado un buen partido!... FUE POR DARLE UN BESO EN LA BOCA A LUIS TONELOTTO (otro pésimo jugador) EN LA CELEBRACIÓN DE UN GOL! (hecho que ustedes también supieron rescatar en Olé, y coincidirán conmigo que en lo jocoso de la situación, pero de nula trascendencia para nosotros, los hinchas). Aquellos días constituyeron su momento glorioso en Perú... de ahí sólo en más críticas a su mediocre juego. En el único partido en el que Cornejo recibió un tibio reconocimiento a su accionar por parte del periodismo, fue en el clásico contra Alianza Lima (un equipo que nunca pelea nada en el torneo) pero, seamos sinceros: aquel día el “Toto” jugó como siempre, pero ustedes saben mejor que yo, que cuando un equipo gana, la prensa califica a toda la plantilla de cinco puntos en más, así un jugador haya ingresado en el minuto 94... Dicho con palabras más sencillas, sólo generalizando, el juego de Roberto Cornejo pudo discriminarse del resto, y calificar de aceptable.
3.- Rescato textualmente algunas palabras del propio jugador, respecto al nulo apoyo del entrenador para con él en momentos en que nuestra dirigencia pensaba rescindirle el contrato por no mostrar un ápice del videíto con el que seguramente el empresario logró colocarlo en la institución: "Pepe tenía que luchar con toda la desorganización. Si peleaba por mí se le complicaba. Un contrato no les significa nada.". Bueno, no puedo sino reírme ante semejante aseveración. Quiero pensar que el “Toto” es tarado, y no sabía por qué el Pepe no lo salía a defender... Dudo que sea así, pero quiero pensarlo. Y si no lo sabía, y quiere, yo se lo explico: Basualdo nunca salió a bancarlo simplemente ¡porque él no lo pidió! desde hace algunos años se ha ido institucionalizando una forma de corrupción en nuestro fútbol cuya mecánica es tan conocida que puedo describirla al detalle: un dirigente viaja al extranjero, arregla los contratos de los jugadores extranjeros, hace acuerdos (no sé qué tan ilegales porque me importan un carajo las leyes) con los empresarios, se meten al bolsillo parte del dinero de la transacción y listo!... de esa forma han venido a nuestro país muchos jugadores foráneos, sin cartel, pero sobretodo sin fútbol.. ¡Así recayó en nuestro triste balompié el “Toto” Cornejo!... Obviamente Basualdo no lo había pedido, por eso le daba igual que se vaya o se quede; es simple: no estaba en sus planes. Prueba de ello es que con la salida del “Pepe” y el arribo de Compagnucci (¿alguno de los dos fue técnico en su país?) al club, recién lo empezaron a poner unos minutos. Con Basualdo, Cornejo jugó un partido de titular (que según el jugador lo hizo de gran manera) y tan bien lo hizo que… ¡Nunca más volvió a jugar desde el arranque!...
4.- Domingo a domingo rezaba frente a la pantalla en blanco y negro, para que el “Toto” se destapara. Pedía a los dioses que, por piedad, le dieran tres minutos de buen juego... que le concedieran el milagro que, de un momento a otro, saliera velozmente como un endemoniado, apilando rivales, burlando al arquero y metiendo un golazo (como aquel del Diego a Inglaterra en el 86)... No sucedió; los dioses se negaron a escucharme. “Toto” cumplió su último partido y creo que yo era el único que todavía lo quería. Cornejo era carismático, lo reconozco, y por eso siempre quise que le vaya bien (en las aburridas clases de Teoría Social que llevamos en la Facultad, nos repiten hasta el hartazgo el carisma como característica fundamental en un político... lástima, porque el “Toto” no era político; jugaba fútbol. Y en el fútbol el carisma no sirve de mucho que digamos). Terminó la temporada y yo todavía quería creer que a Cornejo le fue bien en mi querida U… Como aquel fanático del boxeo, que consciente de que a su púgil favorito lo llevaron por delante en trece de los doce asaltos, ruega que el réferi sea lo suficientemente ciego para darlo ganador... rezaba contrito yo, frente a la tv, mientras un verborrágico comentarista dictaba la sentencia final de quienes, a diferencia de mí, sí saben un poco de fútbol: "el Toto no puede ser jugador de un club de tradición como Univeristario de Deportes... ¡Es una locura pensar en renovarle contrato!"... Por eso me da bronca leer sus declaraciones y calificar a nuestros futbolistas como "pibes de barrio", porque él nunca pudo triunfar aquí. Y por ello, él fue más pibe de barrio que todos, porque nunca pudo lucirse ante la mediocridad de los nuestros. Alguna vez jugó en nuestro país Adrián Czornomaz, que si bien no tiene grandes pergaminos en su país (nunca lo escuché que jugara en Primera de Argentina), no obstante hizo un promedio de 40 goles en el año, lo que quizá sí le daba la autoridad para opinar de nuestro fútbol (y aún así no lo hizo); autoridad que no tiene el ¿señor? cornejo. Nuestro fútbol anda mal, entre muchísimas otras cosas, señor Cornejo, porque nuestros dirigentes traen pésimos jugadores de afuera... ¡Jugadores como usted!
5.- Dije que cornejo mentía en un 90%, porque en algo sí tiene razón: En Perú los sueldos se pagan de a puchitos, como afirma. Existe desorganización al por mayor, los dirigentes no son serios y los clubes pueden pasar meses de meses adeudando los sueldos a los jugadores y el campeonato continúa como si nada ocurriera; en eso no se equivoca Cornejo y está bien que lo diga, pues no es mi intención ocultar las verdades. Pasa que “Toto” fue más allá del límite y mintió burdamente sobre lo que pasó aquí (y ya he explicado con creces en esta misiva)... Cierro la presente, citándolo una vez más: "Te pagan de a puchitos, como a un albañil. Perdí plata. No vuelvo más". Sí, es cierto: pagan de a puchitos y no está bien. Dice que perdió plata, y lo sentimos mucho, teniendo en cuenta que está mal que no se cumpla con un acuerdo firmado. Dice que lo trataron como un albañil. Yo le pregunto: ¿Qué es entonces?... Puedo garantizar que jugador de fútbol no era. Dice que no vuelve más.... FAVOR QUE NOS HACES, ¡Cornejo!
Disculpe Usted la impertinencia.
CARTA DE JORGE SIERRA A ABEL PERALTA
Buenos Aires, 7 de Enero del 2006
Estimado Abel:
No es para nada impertinente, sino todo lo contrario. La verdad es que me agradó mucho leer tu mail, festejo el nivel de tu escritura y tu preparación. Fue un gusto. Además, aquí en la redacción nos hiciste reír mucho.
Un grande saludo...
